¿Cómo ser una surfista en medio de la pandemia?

 Como siempre; a penas uno pone los pies en la tierra, se acaba la diversión

Mafalda –Autor: Quino

Todas estamos metidas en medio de este inesperado maremoto llamado coronavirus. Pareciera ser que cuando ya pensábamos que sabríamos surfear  todos los oleajes que nos presentara la vida, que éramos expertas para manejar y resolver todo lo que nos tocara vivir, surge una inesperada y  fuerte tormenta que nos remueve, nos desestabiliza, y como diríamos algunas “Nos batuquea” fuertemente, y por supuesto  la pregunta ¿Cuándo va a parar este caos? surge constantemente en nuestra cabeza.

Pues sí, lo que teníamos planeado para estos meses, así como nuestros hábitos de vida y de trabajo dieron un sorpresivo giro de 360 grados.

Ah y  por si fuera poco pareciera que las respuestas que leemos, escuchamos y nos comparten, en ocasiones nos animan y en otras nos ponen muy “down”. Les cuento que es normal que nuestros ánimos suban y bajen, y que quizás ni cuenta nos demos.

Sin embargo, todas tenemos la oportunidad de elegir mantener una actitud positiva frente a lo que tenemos delante, ver lo que nos acontece como un reto, como una nueva carrera en esta maravillosa y compleja “Universidad de la Vida”, es una oportunidad para fortalecer y seguir desarrollando a nuestro yo niño.

Pues si mis queridas lectoras nuestro “YO NIÑO”, ese que nos habla en silencio, que en ocasiones pareciera saber muchas cosas de nosotras. Ese donde habitan recuerdos, emociones, experiencias  y vivencias. Ese niño que aún vive dentro de ti, donde aún sientes sensibilidad, tremendura, vivacidad pero también inocencia ingenuidad y pureza.

Nuestro yo niño es sensible y vulnerable, necesita que le prestemos atención, que lo cuidemos. 

Estoy  segura que muchísimas de nosotras coincidimos 100% con nuestra querida y recordada Mafalda cuando dice “Paren el mundo que me quiero bajar”. (Quino). Pues resulta que si podemos hacer un stop, una pausa en medio del caos que está generando esta pandemia, y cuidar nuestro yo niño, nuestro yo adulto, nuestra salud y la de nuestros seres queridos, y ser agentes activas de paz y bienestar.

Pero para ello debemos comenzar por nosotras mismas, “OJO” y no es egoísmo. Por favor recordemos que cuando nos montamos en un avión siempre nos dicen “Debes ponerte la máscara de oxígeno antes de ayudar a otros …”.

Así que las invito a que practiquen un sencillo ejercicio, sean amables con Uds. mismas, con su hermoso yo niño y con todos sus seres queridos. A continuación se los comparto, pueden leerlo en silencio o en voz baja. Por favor repítanlo cada día, en la mañana, en la noche, o cuando les sea más fácil. Y simplemente, con la curiosidad de una hermosa niña observen cómo se sienten.

Meditación de la amabilidad:

En esta época, tomate unos minutos para regalarte  a ti  y  a tus seres queridos frases de amabilidad:

1. Siéntate  en una postura  que te sea cómoda y comienza  prestándole  atención a tu respiración. Cuando tu mente se disperse reconoce a donde se ha ido y con amabilidad vuelve a traer tu atención a tu respiración.  

2. Lee en silencio o en voz baja estas frases de amabilidad hacia ti misma: 
   1. Que me sienta libre de sufrimiento
   2. Que tenga seguridad y tranquilidad
   3. Que tenga salud y bienestar
   4. Que tenga paz y armonía
   5. Que mi corazón este lleno de  amor y compasión 
   6. Que tenga FELICIDAD

Nota.- Te sugiero que las leas 2 veces. Claro, puedes leerlas más veces si quieres hacerlo.

3. Ahora piensa en una persona que para ti es  muy importante,  amplia tu sentimiento de amabilidad y  bondad hacia esa  persona:

4. Pensando en esa persona, lee en voz baja o en silencio estas frases de amabilidad: 
   1. Que se sienta libre de sufrimiento
   2. Que tenga seguridad y tranquilidad
   3. Que tenga salud y bienestar
   4. Que tenga paz y armonía
   5. Que su corazón este lleno de  amor y compasión 
   6. Que tenga  FELICIDAD

Nota.- También te recomiendo leerlas  dos veces o más.

5. Luego, piensa en  todos tus seres queridos, familia, amigos, compañeros de trabajo, mascotas…,  en todas esos seres que para ti son muy importantes.

El objetivo de  este ejercicio  es hacer llegar tu amor y amabilidad a todos los seres vivos del planeta. 

Lee en silencio o en voz baja estas frases de amabilidad:

a. Que se  sientan libres de sufrimiento

b. Que tengan seguridad y tranquilidad

c. Que tengan salud y bienestar

d. Que tengan paz y armonía

e. Que su corazón este lleno de  amor y compasión 

f. Que tengan  FELICIDAD

Y ahora deja que surjan algunos buenos deseos hacia ti y hacia esos seres en quienes estás pensando en este momento. 

6. Vuelve a traer tu atención a la respiración, y para finalizar “FELICITATE”  por dedicar unos minutos a ser amable contigo misma y con los demás.

Queridas lectoras las invito a cuidar  y fortalecer a esa “SURFISTA “ y a ese “YO NIÑO” que transita con Uds. en esta compleja e interesante tormenta que nos está presentando la vida ….

Y como dice nuestra querida Shakira:

Y un día después de la tormenta, cuando menos piensas sale el sol